domingo, 20 de marzo de 2016

Mi nota nunca suena si lo llevas todo al traste

Dicen que dos más dos son cuatro pero que el rosa no pega con el rojo, y yo me niego a creerlo. Me niego a creer que unas combinaciones sí y otras no; me niego a creer que todo está establecido como manden.
Dos más dos no son cuatro si añado una incógnita, la misma que puedo añadir a ese rojo fuego para que sea perfecto para ese rosa que dicen que tiene la vida.
Obviamente, a veces los deseos se me van por completo de las manos.
Ocurre entonces que el fuego ya no es rojo, y que la vida ya no es rosa: todo es naranja, naranja realista y fogoso al que el azul del agua le viene perfecto, y lo apaga, y se me va de las manos, al igual que los deseos.



viernes, 11 de marzo de 2016

A veces les pongo a mis palabras diéresis de colores imitando diademas
Y yo solo observo como juegan en el patio de un poema

Casi siempre te abandonan demasiado pronto
Y las escuchas en bocas ajenas
Y te alegras
Y te enojas contigo mismo como con todo lo que amamos con cierto egoísmo

Y uno se queda en casa, inerte y algo vacío
Acariciando aquel vocablo mudo llamado silencio
Siempre fiel, siempre contigo

Pero todo es ley de vida

Como un día me dijo el poeta Halley,
Si las palabras se atraen, que se unan entre ellas
Y a brillar, que son dos sílabas